Toda separación representa un momento difícil a nivel personal y familiar que además trae consigo una serie de implicaciones legales. Toda pareja que han dado por concluido de manera irremediable su relación debe presentar una demanda de divorcio para que esto sea oficial ante los ojos de la ley.
Las parejas divorciadas dan fin a muchas de sus obligaciones conyugales pudiendo casarse nuevamente, quienes se separan pero no se divorcian, obstaculizan a futuro sus trámites.
El inicio de una demanda de divorcio suele estar acompañada de muchas dudas, por lo que a continuación se aclara todo lo que debe saber sobre el proceso:
¿Qué es una demanda de divorcio?
Una demanda de divorcio es aquel trámite que inicia una persona (o pareja) con la finalidad de que un juez ponga fin a su relación matrimonial.
Todas las demandas de divorcio que se presentan ante el juzgado deben estar debidamente firmadas por un procurador y un abogado. Los particulares no pueden presentar una demanda de divorcio por su cuenta.
Este tipo de demandas judiciales se presentan ante los juzgados familiares que correspondan al domicilio familiar o al de alguno de los cónyuges.
¿Cómo iniciar una demanda de divorcio?: Requisitos para el divorcio
Entes que nada es importante aclarar que no existen causas para el divorcio en España por lo que, además de tener 3 meses o más de casados, no hay requisitos estrictos para empezar el proceso.
Si bien se entiende que la separación irremediable es el detonante del proceso de divorcio, tampoco es necesario que la pareja esté separada con anterioridad.
Basta que exista una disposición de ambas partes para el proceso o que simplemente uno de los cónyuges haga uso de sus principios de libertad conyugal descritos en la ley para dar inicio a su demanda.
Tipo de demandas de divorcio
El proceso de la demanda de divorcio es bastante similar para todos los cónyuges, pero según la naturaleza de la separación se reconocen dos tipos de divorcios: los de mutuo acuerdo (amistosos) y los contenciosos (en desacuerdo).
Conocer las diferencias entre ellos es clave para saber cómo guiar el proceso, qué documentos presentar y tener una idea de cómo orientará el juzgado la solución de la demanda.
Mutuo acuerdo
Cuando los dos miembros del matrimonio acuerdan términos que consideran razonables para su separación pueden proceder a presentar una demanda de divorcio en mutuo acuerdo, entregando una demanda firmada por ambas partes.
También es posible presentar la demanda firmada por solo uno de los cónyuges, siempre y cuando se cuente con una autorización expresa debidamente redactada y firmada.
Los divorcios de mutuo acuerdo siempre serán la primera línea de acción legal y la sugerencia más responsable por parte de todos los abogados de asuntos familiares, dado que es un proceso rápido y muy económico.
Para que esta demanda de divorcio tenga lugar, es importante que se presente también un acuerdo regulador, que es básicamente el motivo de los conflictos en las separaciones. En dicho acuerdo se plasman todos los acuerdos a los que ha llegado la pareja al momento de la separación como el cuidado de los hijos, el uso de los bienes matrimoniales y demás.
Para entregar esta demanda amistosa basta con la firma de un solo procurador y de un solo abogado quien puede representar a ambas partes. Sin juicios ni procesos desgastantes.
Una vez presentada la demanda al juzgado, si este considera que los acuerdos son razonables y velan de manera directa por el bienestar de los menores dentro del matrimonio será un hecho, previa ratificación de las partes.
Divorcio contencioso
El divorcio contencioso es aquel en donde los cónyuges no pueden llegar a un acuerdo razonable para ambas partes o donde existen conflictos de diversa índole que pueden estar o no relacionadas con el motivo de la ruptura, impidiendo un consenso.
Esto también aplica cuando alguna de las partes quiere divorciarse, pero la otra no quiere acceder a la separación. El cónyuge que ha expresado la ruptura insostenible del lazo matrimonial puede iniciar una demanda de divorcio de igual forma.
Este proceso es mucho más complejo, costoso y desgastante tanto a nivel familiar como personal dado que para llevarse a término se requiere de dos procuradores y dos abogados.
Para que este procedimiento tenga lugar una de las partes (o ambos) deben presentar una demanda exponiendo los motivos contextuales que han llevado a la solicitud del divorcio junto con las condiciones a negociar.
En este procedimiento es necesario un juicio y es el Juez quien decide cuáles serán las acciones a las que las partes deberán apegarse de manera obligatoria según acuerda la ley. Siempre pensando en el bienestar de los menores de edad.
¿Cuál es el contenido de una demanda de divorcio?
La redacción de una demanda de divorcio debe hacerla un abogado de asuntos familiares experto en la materia, ya que hay muchas variables a considerar y, teniendo en cuenta los potenciales conflictos de intereses, todo detalle es relevante.
Regularmente, una demanda de divorcio debe tener:
- Nombre de los cónyuges.
- Datos de la celebración del matrimonio: sitio, fechas y demás.
- Exposición numerada de los hechos (motivos).
- Datos de los hijos del matrimonio (si hubiera).
- Voluntad expresa de solicitar el divorcio.
- Exposición numerada de los artículos de ley donde se sustenta la solicitud de divorcio (usualmente el Código Civil).
- Suplico al juzgado para tomar en consideración lo expresado en la demanda.
Dependiendo de si la demanda es contenciosa o amistosa se debe incluir lo siguiente:
- Amistosa: alegato de que se ha llegado a un acuerdo entre los cónyuges el cual se expresará en el adjunto convenio regulador.
- Contenciosa: solicitud de medidas (custodia de los hijos, pensiones, visitas…).
- Contenciosa: explicación del efecto de las medidas para el bienestar último de los hijos.
Documentos necesarios para presentar una demanda de divorcio
Junto con la redacción del documento que expresa la demanda de divorcio es necesario que la pareja adjunte una serie de documentos de soporte que son tanto obligatorios como necesarios en el proceso:
- Un poder para pleitos extendido por la Notaría Pública o por un Letrado de la Administración de Justicia.
- Certificado de matrimonio expendido por el Registro Civil.
- Certificado de nacimiento de los hijos (si aplica) expendido por el Registro Civil.
- Certificado de empadronamiento expendido por el Ayuntamiento correspondiente.
Además de estos documentos existen otros requisitos que dependerán de la naturaleza del divorcio:
Para proceso de mutuo acuerdo
Para las separaciones de mutuo acuerdo es necesario incluir, tal como se menciona con anterioridad en este artículo, el convenio regulador con todos los pactos conyugales bien redactados. El abogado que redacta el documento también debe firmarlo, junto con la firma de los cónyuges.
Para proceso de divorcio contencioso
Además de los documentos inherentes al proceso, que son indistintos para todas las demandas de divorcio, a falta de acuerdos se deben incorporar los siguientes documentos:
- Escrituras de los bienes del matrimonio.
- Los soportes de bienes gananciales y similares de índole privada.
- Toda la documentación relevante al estatus financiero como cuentas bancarias, hipotecas y similares.
- Documentación relacionada con el estatus laboral del cónyuge como contrato de nómina o certificación de desempleo.
- Todo tipo de documentación que pueda soportar de alguna manera las solicitudes del cónyuge ante el juzgado.
¿Cómo es el proceso de una demanda de divorcio?
Dependiendo de la naturaleza de la demanda de divorcio el proceso puede variar mucho. Ya se sabe que las demandas de mutuo acuerdo son más simples, en este caso:
- Se presenta la demanda al juzgado.
- El juez evalúa la demanda y los acuerdos plasmados en el convenio regulador, remitiendo la demanda a trámite.
- Los cónyuges son remitidos al juzgado (sin juicio) para ratificar los acuerdos.
- Se espera sentencia de la legislatura correspondiente al bienestar del menor si es que hay hijos en la familia, en busca de que se garantice el mejor beneficio de los hijos.
- Se espera la sentencia final disolviendo oficialmente el matrimonio.
En caso de que el divorcio sea contencioso el proceso es mucho más largo y conflictivo. En línea general funciona de la siguiente manera:
- Se presenta la demanda por uno de los cónyuges, firmada por un procurado y un abogado.
- El juez evaluará la demanda remitiéndola a trámite de cumplir con los requisitos.
- Se envía el requerimiento de respuesta de la demanda a la otra parte del matrimonio.
- Se espera la contestación de la demanda que debe de cumplir con los requisitos pautados anteriormente, como la firma del procurador y el abogado.
- Se pauta una fecha y debida citación para el juicio.
- Se realiza el proceso del juicio incluyendo testimonios, presentación de pruebas y demás.
- El juez decidirá los convenios a los que las partes deben apegarse.
- Se dictamina la sentencia disolviendo así el matrimonio.
Muchas veces la disolución del matrimonio no es lo mismo que la separación de los bienes o el fin de las responsabilidades con terceros, así que se debe consultar con el abogado de asuntos familiares cuáles serán los pasos a seguir después que la demanda de divorcio haya tenido lugar.